Los grupos de apoyo

PILAR PASTOR, PSICÓLOGA DE FMLC

El ser humano es un ser social. Nacemos, crecemos y morimos en sociedad. Los procesos psicológicos que desarrollamos están influidos por nuestra interacción con los demás. Y por eso el duelo, como proceso de adaptación a la muerte de un ser querido, también lo está.

El duelo es un proceso en parte interno y en parte compartido. El afrontamiento de las tareas, las decisiones que va tomando el doliente, la forma en que va andando individualmente el camino del duelo, etc., es un proceso interno que se lleva a cabo dentro de una familia, de un grupo, en sociedad.

Cómo influye el entorno social en la superación del duelo

Nuestra sociedad afronta la muerte evitándola. Se intenta no hablar de dolor, de enfermedad, de la muerte, con la consecuencia de que, cuando nos topamos con ella, carecemos de recursos para hacerle frente. La sociedad, el entorno más cercano del doliente, le apremia para que esté bien. Para que no piense, se distraiga y no esté en contacto con el dolor. Sin embargo, todos estos mecanismos de evitación provocan que el duelo se complique.

Todos los procesos que se dan en sociedad influyen definitivamente en la evolución individual del duelo:  Cómo lo experimenten en su familia (si se habla o no de lo sucedido y de lo que se siente, si se permite o no la expresión emocional, si se anima hacia la mejoría o se impone el estancamiento y dejar de vivir). Cómo expresa el doliente su malestar a los demás, si lo expresa o no, si utiliza mecanismos auténticos, etc

La importancia de la terapia de duelo grupal

De aquí proviene la potencia de la terapia de grupo en el trabajo del duelo. Ésta aúna el trabajo individual de cada participante en un entorno de interacción social real. Dicho entorno permite, por un lado, compartir la experiencia del duelo y, por otro, ensayar nuevas maneras de estar y sentir en relación.

La experiencia con los grupos con los que trabajamos en FMLC nos ha permitido estudiar tanto los ingredientes fundamentales para que el grupo de terapia funcione, como las claves del trabajo de duelo en grupo. A continuación, nos centraremos en explicar cuáles son los principales elementos de funcionamiento de un grupo de terapia.

Factores clave de la terapia de grupo

Para que todo grupo funcione, tienen que estar presentes estos elementos. Nosotros los vamos a relacionar con la vivencia del duelo:

  • – Cohesión. Es una de las características absolutamente esenciales de una terapia de grupo exitosa. La cohesión grupal se refiere a la unión que los participantes sienten hacia el grupo y el resto de sus componentes. Los miembros del grupo cohesivo se aceptan y apoyan. En los grupos de duelo esto queda de manifiesto en el hecho de que, a pesar del dolor personal de cada participante, estos escuchan y participan de las experiencias de los demás.
  • – Compartir y ser aceptado: El hecho de expresar las emociones, el dolor, los pensamientos, etc, tiene una función de desahogo: sirve para poner límites y hacer real la experiencia interna del doliente. Sin embargo, lo fundamental es que expresar a los demás nuestro mundo interior y ser aceptado por el grupo resulta de primordial importancia para el crecimiento personal. El hecho de que uno de los miembros del grupo de duelo comparta con los demás participantes sus sentimientos más profundos o pensamientos que no comparte con nadie más, resulta una experiencia curativa.
  • – El grupo funciona como una unidad: Cuando el grupo es cohesivo, se acepta y se apoya. Empieza a funcionar como un solo organismo, buscando la mejoría de todos sus integrantes y yendo en la dirección de la motivación por el cambio.
  • – El grupo como fuente de apoyo: Cada participante recibe ayuda del grupo, escucha, comprensión, ayuda práctica, etc. El doliente encuentra en sus compañeros de grupo un entorno seguro donde expresarse libremente, a menudo cuando su propio entorno social y/o familiar ya se ha cansado de prestarle ayuda. Pero no sólo se trata de eso, sino que además el doliente también se convierte en agente activo de ayuda, participando de la experiencia de sus compañeros y fomentando la empatía.