La maternidad va mucho más allá que tener un bebé en brazos

¿La pérdida de un bebito en el vientre se olvida o se supera?

Ninguna de las dos cosas. Se aprende a vivir con ello. Se cree que una pérdida de pocas semanas no ha de suponer gran pérdida para alguien ya que no ha tenido vida física visible.

Lo cierto es que una madre es capaz de sentir amor por su bebé desde el minuto 0 de su concepción ¡¡e incluso antes!! Perderlo es una gran tragedia de la que cuesta mucho recuperarse.

Y más porque  en nuestra sociedad no hay rituales, ni sagrados ni cotidianos que marquen un esquema de cómo ha de continuar la vida en adelante, con lo que los padres se encuentran terriblemente confundidos y desorientados. Eso por supuesto no ayuda mucho.

Si no se enquista el duelo, el tiempo, tener otros hijos, pueden aliviar en parte el dolor. Pero en muchos casos la cicatriz emocional y energética será como esas cicatrices físicas que duelen cuando va a cambiar el tiempo. Un hijo es un hijo y siempre estará presente de una manera u otra en la vida de los padres. Y de los hermanos y de los abuelos…